Uno de los tesoros del valle sin lugar a dudas y por supuesto la joya de nuestras instalaciones. Una maravillosa muestra de arte del románico con caprichosas influencias que mantiene estoicamente su belleza al paso del tiempo. Sus paredes y sus arcos aún intactos, llevan escuchando el ir y venir de los peregrinos desde hace siglos. A día de hoy, envuelta entre jardines, sobre un idílico recodo del rio Arenal, la Ermita de los Llanos continua recibiendo visitantes y transmitiéndoles su calma y su magia de una manera inigualable.